En la cocina de Laura Di Cola no hay cesto para la basura porque no hay residuos. Si la receta lleva ananá, usará la pulpa para la preparación, picará la cáscara y la aprovechará en la marinada de las carnes porque ayuda a tiernizarlas y con el penacho preparará una deliciosa infusión.
Algo similar hará con los choclos: los granos aportarán color y sabor al guiso, mientras que las chalas, las rebarbas y los troncos pasarán por el horno a muy baja temperatura (o por un deshidratador) y se convertirán en polvo deshidratado –junto con las “sobras” de todos los vegetales que ese día desfilen por su cocina- para aromatizar otras preparaciones.
En esta clase maestra ofrece todo su conocimiento y comparte los mil y un tips para conocer una nueva mirada sobre la alimentación: nada se tira, todo se transforma: en este caso, en un nuevo plato tentador.
Laura pela, pica, separa, recicla y luego guarda semillas que plantará más tarde “a la sombra”, para volver a poner en acción el ciclo de la naturaleza.
En Foodit prepara una carbonada –ese guiso típico del recetario argentino- tiene una variante sabrosa: en vez del clásico orejón de damasco propone usar ananá. Además, Laura muestra el paso a paso y cómo a medida que la receta avanza, va “juntando” sabor en la olla hasta lograr un plato magistral.
Utiliza cortes ideales para cocciones largas, comparte sus consejos sobre cómo conviene cocinar los pedacitos de carne y que queden tiernos y no sobrecocidos; sobre cómo cuidar el ajo para que no se queme, cuánto aceite conviene poner entre paso y paso y contará todos sus secretos.
Para acompañar, hace un pan naan, típico de la India y los países vecinos, que se elabora con yogur casero, el mágico polvo deshidratado de vegetales y un poolish (una masa previa que sirve de fuerza para desarrollar el gluten de la masa). Todo explicado prolijamente y con el mismo amor que Laura le imprime a sus recetas.
El resultado, una clase de cocina y mucho más. Una forma de vida, un estilo único, puro sabor.
Cocinera sustentable, es promotora del movimiento “de la huerta a tu mesa” y de una cocina circular, sin desperdicio. “Cocinar es la mejor excusa para nutrirnos en todo sentido. Para educarnos, alimentarnos, para compartir momentos y para honrar a la naturaleza. Prefiero los platos simples como un pescado grillado con limón y vegetales al vapor, o una pasta rellena casera con aceite de oliva y hojas verdes. También las preparaciones complejas como los guisos o los curries donde todo se aprovecha. Adoro los bols o ensaladas llenas de ingredientes frescos y legumbres. Me gustan los platos que provocan gratitud, placer y satisfacción, en ese orden”.
Para los que quieren mejorar su alimentación y disfrutar de platos más sabrosos; para los que buscan conocer o profundizar conocimientos sobre técnicas de cocina; para los que buscan soluciones rápidas y prácticas para el día a día; para los que se interesan en sacarle el máximo provecho a los alimentos y para los apasionados por mantenerse al día con las últimas tendencias gastronómicas, La Nación lanzó Foodit, con un propuesta clave: “Hoy se cocina”. El proyecto nace bajo la creencia en el valor de la comida como un lazo que une a las personas.
La nueva plataforma de suscripción digital es un aliado de quien cocina: en el antes y durante (con inspiración, variedad, practicidad, conocimiento y bienestar) y el después (en el momento de compartir y disfrutar) con una propuesta de servicio única en el mercado basada en contenido curado y generación de experiencias novedosas. Además, la plataforma se diferenciará por la facilidad con la que se encontrará y organizará el contenido.
Recetas de diversas corrientes alimentarias (a las propuestas clásicas se sumarán vegetarianas, sin gluten, keto, sin lactosa y veganas), noticias del sector, curiosidades, guías de cocina con técnicas, videos con el paso a paso y masterclasses con cocineros referentes de los restaurantes más reconocidos serán parte del contenido. Porque la cocina es placer, emoción, sabor y creatividad: hacer los platos favoritos, aprender nuevas recetas (desde las más originales hasta las más fáciles, saludables y rápidas) y compartir momentos agradables en la mesa tiene un impacto positivo.
