Cómo hacer una Rosca de Reyes casera y fácil

La Rosca de Reyes es un pan dulce que se disfruta tradicionalmente el 6 de enero, durante la celebración del Día de Reyes, que conmemora la llegada de los Reyes Magos a Belén. Este pan es muy popular en países de habla hispana y en algunas regiones de Europa, como España. Símbolo de unión, alegría y tradición, tiene algunos secretitos para que la masa resulte suave y esponjosa y la crema pastelera salga perfecta.

Con su forma circular, la rosca simboliza el amor eterno y la continuidad, además de representar la corona de los Reyes Magos. Su masa es suave, esponjosa y ligeramente dulce. Está aromatizada con ralladura de naranja, agua de azahar o esencia de vainilla. Se decora con frutas confitada que evocan las joyas de la corona y, en algunas versiones, puede incluir rellenos como crema pastelera, dulce de leche, nata o chocolate, según las costumbres locales.

Una de las tradiciones más esperadas es esconder dentro de la rosca una pequeña figura de un niño o un haba seca. La persona que la encuentre suele asumir la responsabilidad de organizar la próxima reunión. Este detalle añade un elemento de diversión y complicidad a la celebración.

Rosca de reyes tradicional

Ingredientes para la crema pastelera

1. 1 L de leche
2. 600 g de azúcar
3. 6 Huevos
4. 100 g de fécula de maíz
5. 80 g de harina 0000
6. 1 cda. de esencia de vainilla

Ingredientes para el prefermento

1. 25 g de levadura fresca
2. 150 ml de leche
3. 30 g de miel
4. 250 g de harina 0000
5. Para la masa
6. 40 g de levadura
7. 150 ml de leche
8. 750 g de harina 0000
9. 3 huevos
10. 1 cdta. de esencia de vainilla
11. 1 limón
12. 200 g de azúcar
13. 200 g de manteca

Ingredientes para el armado

1. mermelada de damasco a gusto
2. fruta glaseada a gusto

1. Preparación para la crema pastelera

1. En una cacerola colocar la leche junto con la mitad del azúcar. Llevar a fuego medio y calentar sin que llegue a hervir.
2. Mientras tanto, en otro bol mezclar los huevos, el azúcar, la fécula y la harina.
3. Verter parte de la mezcla de leche caliente sobre los huevos y mezclar rápidamente para que estos no se cocinen.
4. Llevar todo nuevamente a la cacerola y cocinar sin dejar de remover con un batidor de alambre hasta que la crema pastelera espese. Añadir la esencia de vainilla.
5. Retirar y reservar cubierta con film en contacto.

2. Preparación para el prefermento

1. En un bol, disolver 25 g de la levadura en 150 ml de la leche junto con la miel y 250 g de harina. Formar una pasta, tapar el recipiente con un lienzo y dejar descansar el fermento durante 2 horas.

3. Preparación para la masa

1. Pasado el tiempo, empezar a hacer la masa. Tamizar la harina en forma de corona sobre la mesada. En un recipiente, disolver la levadura restante en el resto de la leche.
2. Colocar los huevos en el centro de la corona junto con la esencia de vainilla, la ralladura del limón, el azúcar, la manteca pomada y el prefermento.
3. Agregar de a poco la leche con la levadura y tomar la masa desde el centro hacia afuera hasta formar un bollo, amasar bien hasta que la masa quede suave y elástica.

4. Descanso y formado de la masa

1. Dividir la masa en 2 o 3 bollos y dejarlos descansar dentro de bols separados tapados con un repasador limpio o film hasta que doblen su volumen.
2. Tomar de a uno por vez los bollos y amasarlos suavemente para desgasificar la masa. Darle forma esférica y con ayuda del codo limpio y enharinado, hacer un orificio en el centro, abrir de a poco con cuidado de no desgarrar la masa hasta obtener un anillo.

5. Horneado

1. Colocar las roscas sobre una placa enmantecada y dejar levar tapadas nuevamente entre 40 a 60 minutos, o hasta que dupliquen su tamaño.
2. Cubrir con la crema pastelera, pintar con huevo y espolvorear con azúcar.
3. Hornear en horno precalentado a 170°C durante 35 minutos.
4. Luego, pintar cada rosca con mermelada de damasco y, si lo desea, decorar con higos o frutas confitadas.